Situada justo en el centro de la isla de Ibiza, descubro una finca en medio del campo, rodeada por un vergel de naranjos. Un lugar idílico llamado Atzaró. Un hotel de agroturismo en una finca centenaria de unas 10 hectáreas que mantiene la familia Guasch desde hace ocho generaciones.
Cumpliendo con su décimo aniversario mantiene intacta su arquitectura ibicenca de paredes blancas encaladas y suelos de barro cocido rojizo. Es un oasis invadido por aromas que huelen a jazmín, azahar, romero y lavanda donde cada rincón y cada habitación posee su propia personalidad con decoración de pinceladas asiáticas y africanas, mobiliario balinés y objetos de arte de diferentes culturas. Sus espacios abiertos recuerdan a los jardines árabes y a los maravillosos patios de la Alhambra, con sus fuentes, piscinas, flores, plantas y su exótica vegetación de palmeras y de árboles autóctonos.
La gastronomía del restaurante La Veranda es de km 0 y con productos orgánicos cultivados de su propio huerto. El Spa es el único de la isla que existe al aire libre. De estilo balinés. Con techos de sabina y artesonados de madera tallados minuciosamente con decoración floral. Un remanso de paz inmerso en la naturaleza donde desconectar de todo y vivir la vida de manera mas sana y natural.
Natural life & Natural decoration